Claudio Giráldez: «Quedan pasos por dar y mucho por pelear»

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

Óscar Vázquez

El técnico del Celta subraya que lo prioritario era ganar, pero admite momentos de descontrol y hace autocrítica; destaca, eso sí, que su equipo tuvo fe y puso «corazón de sobra» ante el Villarreal

05 may 2024 . Actualizado a las 19:52 h.

El entrenador del CeltaClaudio Giráldez, no quiere lanzar las campanas al vuelo pese la importancia vital que concede al triunfo frente al Villarreal, que dedicó a las madres celtistas aprovechando que se trataba del primer domingo de mayo, dedicado a ellas. Después, venía el análisis: «Quedan pasos por dar. Hay que ser autocríticos, ha habido momentos de descontrol y dudas que no me han gustado. También es verdad que lo importante era sacar el partido adelante y lo hemos hecho». Valora que tuvieron fe, pero insistiendo en que «queda mucho por pelear».

En ese sentido, puso como ejemplo para estar alerta el partido de la jornada anterior, ante el Alavés en Mendizorrotza. «Hay que seguir trabajando para que no nos pase lo que nos pasó la semana anterior» de relajarse tras vencer al Las Palmas y acabar sin conseguir hacer el partido que debían. «Hoy hemos sacado un partido importante y solo hemos conseguido eso», subraya el porriñés.

No tuvo problema en reconocer la superioridad visitante en muchos momentos de un partido condicionado por la roja a Santi Comesaña. «Tienen mucha calidad y han tenido personalidad en situaciones de igualdad para seguir jugando. Nos ha costado ajustarnos en sus movimientos de Guedes hacia dentro, la altura de Baena», aparte de no estar certeros en ataque, incidiendo en el descontrol y el desorden y sin pasar por alto que «evidentemente, la expulsión de Santi Comesaña marca el partido».

Dentro de la autocrítica, también se mostró comprensivo con sus jugadores. «Es entendible en este momento, con lo que nos estamos jugando, que cuando te pones por delante estando con uno más allá esa sensación de ‘voy o no voy’. Ojalá haberlo cerrado antes, pero lo importante era ganar y lo hemos conseguido», apuntaba sin perder la ocasión de repetir que hubo muchas cosas que no le gustaron y que analizarán, pero que este duelo también deja «muchas cosas buenas».

Admite que con el 3-2 en el marcador, demasiada gente estaba yendo al ataque y buscando más, caso de Ristic o Luca de la Torre, mencionó. «Tenemos que hacerlo desde el control. No siempre el camino mejor es el más rápido hacia el área rival», teniendo también en cuenta que había habido cambios y estaban algo desajustados. «Habíamos metido a (Óscar) Mingueza por dentro y a Carles (Pérez) por fuera para intentar tener ese pase filtrado de Mingueza desde situaciones de dentro. Estábamos con Iago jugando entre líneas, con Larsen y Tasos (Douvikas) arriba. Es difícil reajustarte cuando te pones por delante», sostiene. Espera que puedan tener «cada vez las cosas más claras entre todos y dentro del campo», siendo capaces de reajustarse con más facilidad.

En positivo valora que en esta ocasión fueron capaces de llevarse el partido «por empuje», que era algo que habían echado en falta la jornada anterior. «En muchos momentos han sido mejores, es una realidad, pero en cuanto a ocasiones, a empuje, nos hemos llevado el partido. Hoy, corazón hemos puesto de sobra».

Giráldez valoró que tanto Franco Cervi como Douvikas entraron muy bien al partido y se detuvo, preguntado por él, en el griego. «Sabemos que en el área es determinante, piensa permanentemente en gol, está centrado en el área y tiene que completarse poco a poco para ser todavía más potente, tiene mucho potencial, nos está aportando mucho», comenta. Añade que su actitud está siendo muy buena, que aporta «muchísima energía» y que aporta en la presión y los desmarques. Mantiene que puede convivir en momentos puntuales con Larsen e incluso con Aspas.

Acerca de cuántos pasos hay que dar para conseguir la salvación, fue conciso. «Cuatro pasos, quedan doce (puntos), estamos a ocho... Cuatro pasos». Volvió a agradecer el cariño que recibe por parte del celtismo, pero siempre huyendo del protagonismo: «Soy consciente. Nos han empujado en momentos complicados, nos llevan e en volandas, pero no va de mí, no soy protagonista. Los chicos han hecho un esfuerzo brutal, se merecen la victoria, han trabado para conseguirla y soy un actor secundario», pidiendo que el cariño sea para los futbolistas.