«Las largas sombras», un «thriller» femenino sobre la amistad y la culpa

La Voz SAN SEBASTIÁN / EFE

PLATA O PLOMO

La directora y guionista Clara Roquet y las actrices Elena Anaya, Irene Escolar, Marta Etrura y Belén Cuesta
La directora y guionista Clara Roquet y las actrices Elena Anaya, Irene Escolar, Marta Etrura y Belén Cuesta Javier Etxezarreta | EFE

La primera serie dirigida por Clara Roquet está protagonizada por Belén Cuesta, Elena Anaya, Irene Escolar, Marta Etura e Itziar Atienza

11 may 2024 . Actualizado a las 09:45 h.

Las largas sombras, la primera serie dirigida por Clara Roquet, protagonizada por Belén Cuesta, Elena Anaya, Irene Escolar, Marta Etura e Itziar Atienza, ofrece un poderoso thriller femenino sobre la complejidad de la amistad y el peso de la culpa, que abre un abismo adictivo e inquietante. Un pacto de sangre y unos restos humanos centran el argumento de esta serie.

Clara Roquet, guionista de filmes como Petra y Que nadie duerma, y las actrices Irene Escolar, Marta Etura e Itziar Atienza han desvelado algunos detalles de esta serie sobre «mujeres heridas», inspirada en la novela de Elia Barceló.

La sorpresiva aparición de unos restos mortales en una gruta de Mallorca lleva a la inspectora Paula Ríos (Irene Escolar) a desplazarse a la isla. Los restos corresponden a su hermana mayor, Mati, desaparecida durante un viaje de fin de curso hace 25 años.

El hallazgo sacude las estables vidas del grupo de amigas de Mati, compañeras de aquel último curso de instituto en Elda (Alicante). Han pasado 25 años pero ninguna ha podido olvidar aquella misteriosa desaparición que la policía consideró «voluntaria».

En total, son seis episodios de 50 minutos aproximadamente los que arman esta historia que, según Roquet, es esencialmente una serie de actrices, de mujeres, de personajes con múltiples «capas» por las que irremediablemente se derraman «sus máscaras, sus traumas».

Aunque se sustenta en una trama de thriller, unos puntos de giro y un misterio potente, el «corazón de la serie» está en la complejidad de la amistad femenina, una «amistad sanadora», alejada de clichés, un lugar en el que «ser tú misma», asegura Atienza. Son mujeres imperfectas, complejas, con claroscuros, que cargan con diferentes «heridas» con las que, de una forma u otra, logras «empatizar», señala Etura, convencida de que participar en este proyecto ha sido un «regalo», pero también un «reto».

Frente al grupo de amigas, se sitúa la inspectora Paula Ríos, encarnada por una poderosa Irene Escolar, cuya lejanía con el personaje le exigió una enorme «concentración» en todo el rodaje, ha recordado.

Es una mujer «hermética», que está en la «línea» y que, sin embargo, al final intuimos que también se abre a través de una de esas ‘capas' que sustentan la complejidad psicológica de los personajes, explica.

Clara Roquet, tras su debut triunfal con Libertad, exhibida en el Festival de Cannes en el 2021, firma ahora su primera serie como directora que, según ha comentado, no tendrá segunda parte tal y como se adivina tras el desenlace de una historia cuyos elementos se desvelan poco a poco para encajar después como en una sintonía.

Las potentes interpretaciones de Elena Anaya (Rita), Belén Cuesta (Teresa), Irene Escolar (Paula), Marta Etura (Sole), Itziar Aitenza (Candela), Ana Rayo (Carmen), o Lorena López (Lena) encajan a la perfección con las de sus alter egos adolescentes con las que trabajaron también con «juegos de espejos» para hacer más creíbles las transiciones entre personajes, recuerda la directora.

El calor, los ventiladores, las persianas bajadas, los insectos, el sonido de un reloj y la sensación de opresión ayudan a crear una atmósfera cargada e inquietante a través de la cual los «viejos pecados proyectan, sin duda, largas sombras».